Disparo y a correr

Los amantes del atletismo celebran la excepcionalidad de este verano. Sólo tres semanas después de la conclusión del Campeonato del Mundo en Eugene, asoma en el horizonte otro gran acontecimiento: en este caso, el Campeonato de Europa (15-21 de agosto en Múnich). Tras los buenos resultados obtenidos por la delegación española en el certamen universal, el Europeo promete fuertes emociones y, sobre todo, despierta ilusionantes expectativas. Con respecto a la Comunitat de l’Esport, viajan a Alemania ocho atletas. Los valencianos que han entrado en la lista de Pepe Peiró, formada por 93 atletas (51 hombres y 42 mujeres) son: Laura Méndez (Playas de Castellón) en maratón; Claudia Conte (Playas de Castellón) en heptatlón; Carmen Marco (Valencia CA) en el relevo 4×100; Víctor Ruiz (Playas de Castellón) en 3.000 m obstáculos; Quique Llopis (Gandia Alpesa) en 110 m vallas; Eusebio Cáceres (independiente) en longitud, Pablo Torrijos (Playas de Castellón) y Marcos Ruiz en triple salto.

Eusebio Cáceres, de 30 años, viene de ser octavo en Eugene. Siendo un resultado meritorio (de hecho, es la tercera ocasión en que lograba plaza de finalista en un Mundial al aire libre, tras la cuarta posición en Moscú 20213 y la séptima en Doha 2019), Eusebio no quedó plenamente satisfecho. Ni por las marcas (8,03 en la calificación, 7,93m en la final) ni por el puesto ocupado, ni por las sensaciones (molestias en el tobillo izquierdo durante la final). En la transición entre el Mundial de Eugene y el Europeo de Múnich, el saltador de Onil ha seguido tratándose de esta dolencia. Parece que podrá competir con, al menos, ciertas garantías.

Por su parte, Claudia Conte sigue sacando fuerzas de donde apenas quedan, pero con una mentalidad y una motivación de hierro. Así se encuentra la “combinera” castellonense a pocos días de afrontar su primer Europeo absoluto. Claudia, de 22 años, ha tenido que hacer frente a una temporada muy dura. Sobre todo, por la disputa de dos grandes torneos que, en principio, no figuraban en su particular hoja de ruta: el Mundial bajo techo en Belgrado y el Mundial al aire libre en Eugene. En todos los eventos, la atleta ha respondido y ha confirmado lo que es, una excelente competidora. De hecho, sin ir más lejos, hace apenas 3 semanas, en el certamen universal de Eugene soñó con el récord de España de heptatlón. Al final, tuvo que “conformarse” con hacer marca personal, 6.194 puntos.

Para Enrique Llopis es su momento. Es su torneo. Condicionado por los problemas físicos hasta, prácticamente, el mes de mayo, el atleta de Bellreguard no llegó en las mejores condiciones al reciente Mundial de Eugene. Pese a todo, fue de menos a más y firmo una actuación muy correcta. Superó in extremis las series iniciales para acceder a las semifinales (entro como 24º y último con un crono discreto de 13:58). Ya en las semifinales, estableció el 16º mejor tiempo con un registro de 14:44, a sólo 3 centésimas más de su mejor marca de siempre. Eso sí, en una clasificación imaginaria y parcial sólo de europeos, Llopis, de 21 años, fue el séptimo vallista continental en Eugene, dato que le motiva y que le hace albergar esperanzas de cara a su gran objetivo en Múnich: convertirse en uno de los 8 competidores en la gran final.

Torrijos llega corto de preparación y con pocas competiciones previas. Pablo no pudo brillar en el Mundial de Eugene. Del total de 28 participantes, el triplista castellonense ocupó la plaza 23ª. Además, con una marca discreta, 16,32m. La lógica indica que el atleta castellonense llega mejor a Múnich, donde espera salir de esa especie de travesía por el desierto en la que se encuentra inmerso desde que se lesionó pocos minutos antes de competir en los Juegos Olímpicos de Tokio, en pleno calentamiento. Tras perderse la temporada de pista cubierta, el deportista no pudo entrenar con normalidad hasta, prácticamente, principios de mayo. Su mejor marca del curso, 16,72m, llegó en el Campeonato de España, en Nerja. Torrijos, de 30 años, se dispone a afrontar su cuarto Europeo al aire libre. En Zúrich 2014 y en Ámsterdam 2018, fue octavo. En Berlín 2018, concluyó en una brillante quinta plaza.

La joven atleta oriolana Carmen Marco, de 22 años, es una de las seis velocistas convocadas para el relevo 4×100. Será en el mismo evento cuando Pepe Peiró, el seleccionador nacional, decida las cuatro atletas elegidas y descarte a las otras dos. En principio, y atendiendo al gran nivel mostrado por el cuarteto que compitió en el Mundial de Eugene, Carmen lo tiene complicado.

Laura Méndez espera tener más fortuna que en los JJ.OO. de Tokio, donde se vio obligada a abandonar víctima de las adversas condiciones climatológicas. Otro de sus objetivos pasa por convertirse en la mejor de las 4 españolas que disputan el maratón.

Mientras, Víctor Ruiz espera parecerse al atleta competitivo de las semanas previas a Eugene y no al deportista que no obtuvo el resultado esperado en los 3.000m obstáculos del certamen mundialista. Si está en sus marcas, el fondista de Utiel tiene opciones de alcanzar la final.

Por último, Marcos Ruiz vuelve a ser una incógnita en el triple salto. Se le presupone un gran potencial, pero nunca lo ha plasmado en un gran evento.

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